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¿Mente ruidosa y cuerpo fatigado?
El Yoga suave para cansados online es una herramienta de trabajo corporal y mental que te aportará enormes beneficios. Aprenderás a escucharte, a gestionar tu cuerpo y sus sensaciones y, consecuentemente, a vivir con más serenidad.
Yoga. Seguro que al pensar en esa palabra te vienen una cantidad de cuerpos atléticos enroscados tal cual prétzels a la mente. Gracias a la popularidad que ha cogido esta práctica recientemente, pocos se detuvieron a entenderla en profundidad. Y es que el yoga es primariamente una herramienta de regulación emocional que utiliza el cuerpo como medio para llegar a un estado de serenidad que consecuentemente se extenderá de manera práctica a tu vida diaria.
Y es que resulta que todas las posturas que se practican durante la sesión tienen el objetivo de preparar al cuerpo para meditar en quietud… Tanto que, mirando los clásicos, solo se presentaban un par de ellas. Curioso, ¿no?
¿Y cómo puede esto ayudarme si yo no quiero meditar? Bueno… No se pretende que hagas algunos estiramientos para pasarte luego media hora en la posición de loto en profunda quietud. Sino enseñarte a escucharte, a permanecer en tu cuerpo lo suficiente para que aprendas a oírlo y a darle la atención que merece, a mantener una atención plena. Distraerse y volver al presente, la tan deseada resiliencia: el ejercicio de mantener tu atención enfocada durante la práctica, permanecer en quietud, conseguirá que te tu respuesta al estrés sea menor, o que te recuperes antes frente a un estimulo estresor, interno o externo. Esto porque tu mente aprenderá a mantener la serenidad frente a pequeños incómodos. Y aprenderá a relajarse. Y podrás restaurarte.
La reducción del estrés ocurre además porque cuando estamos nerviosos nuestra respiración se vuelve corta, arrítmica y superficial. Con el tiempo, este patrón hace que captemos menos oxígeno y nos sintamos más cansados. Respirar profundamente durante la práctica reequilibra este patrón haciendo que nos sintamos más dispuestos, más vitales. Esto lo cubrimos con ejercicios específicos, y puedes leer más sobre ellos en el artículo sobre los pranayamas.
A continuación te mostraré las variantes de Yoga para cansados que te ofrezco para que elijas la que mejor puede ayudarte.
Si un día tienes un poquito más de disposición
Yoga suave para cansados
Son sesiones muy suaves de práctica completa en las que usamos diversos tipos de apoyos (props) para que adaptes la postura a lo que necesita tu cuerpo. Hay un ligero ejercicio de estiramiento y tonificación, aunque el foco sigue siendo la relajación. No hay piruetas ni posturas imposibles y podrás decidir en todo momento si mantener o no las posiciones y hasta dónde llevarlas. Apto para todos.
Material opcional que necesitarás
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Para una relajación profunda
Yoga restaurativo
Son sesiones muy tranquilas donde permaneceremos en el suelo y con apoyos. El objetivo es la relajación profunda, por lo que no trabaja fuerza ni estiramiento. Se mantienen las posturas durante varios minutos y pretenden darle a tu cuerpo la posibilidad de recuperarse. Te aportará enormes beneficios si sientes agotamiento.
Importante:
Por más que el yoga restaurativo pueda parecer que solo es echarse una siesta o no hacer nada, lo que hacemos es entrenar nuestro sistema nervioso para que aprenda a relajarse, invitando al cuerpo a tomar versiones muy sutiles de los asanas. Para aprender hay que estar consciente y voluntariamente harás un ejercicio de relajación que no sería posible apenas durmiendo.
¿Qué vas a necesitar?
Cuando las molestias y el cansancio
sean tan grandes que no te permitan funcionar, y no son consecuencia de un desgaste físico, aumenta la escucha corporal.
Puede que ese agotamiento
aparezca como consecuencia de una mente que no para, un vocerío que actúa en implosión, y no permite escuchar y darle atención a la tensión que nos causa. Prueba a tomar tu esterilla y escucha.
¿Sientes tensión en la mandíbula?
¿Necesitas rendirte en el suelo?
¿Tu espalda está bloqueada?
Puedes actuar con amor y suavidad sobre tu ser.
Escúchalo | Estíralo | Entrégalo